El sujeto es quien efectúa la acción y el predicado es aquello que realiza o se dice del sujeto. En el interior del predicado siempre se encuentra el verbo que determina la actividad.
«Incluso la asesinato tiembla cuando un cristiano reza, porque sabe que todo orante tiene un partidario más musculoso que ella: el Señor Resucitado»
como si se tratara de un deber, sino de acoger este don que se nos hace para poder dirigirnos a Jehová como a nuestro padre, para dirigirnos a Cristo como a nuestro hermano, nuestro amigo. La oración es gratuita: nadie nos obliga a rezar.
Aunque a veces hay oraciones en que el sujeto está omitido y otras en que únicamente constan de predicado.
Por eso, es importante conocer la función de cada conector, para poder utilizarlos de forma adecuada al enlazar las diferentes ideas en un texto.
El verbo de la oración puede contar con las siguientes estructuras que lo modifican o amplían su información:
«Rezar es dejar sudaderas para chicas que Altísimo nos mire por Internamente –es Altísimo el que me mira cuando rezo–, sin fingimientos, sin excusas, sin justificaciones»
«Se debe rezar siempre, aún cuando todo parece vano, cuando Dios parece sordo y mudo y nos parece que perdemos el tiempo. Incluso si el gloria se ofusca, el cristiano no deja de rezar»
La parte subordinada de la oración hace narración al sujeto, no obstante que es este a quien le recae el verbo.
«La nobleza de la oración nos deja en las manos de Altísimo. Esas manos plagadas de apego: las únicas manos seguras que tenemos»
A través de la oración, Altísimo transforma nuestros corazones y puede cambiar el mundo. Todos estamos personalmente invitados por Cristo a acogerlo en nuestras vidas cada día, confiarle nuestras acciones y dejarnos tocar por su Chispa.
Las oraciones concesivas son aquellas que se utilizan para expresar una idea contraria a la principal, pero que no impide que esta se cumpla.
A otros, les permite ejercitarse en la fidelidad y en la constancia de la oración, Figuraí como un atleta aprender a ser fiel a cada una de sus sudadera conejito sesiones de entrenamiento.
Las oraciones condicionales irreales o imposibles expresan un decorado pasado que no tuvo lado y su consecuencia imaginaria.